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Una empresa colaboradora del Parque Científico UC3M mide las emisiones de carbono de las actividades digitales
La nueva directiva europea que entrará en vigor en 2025 exigirá a las empresas que informen sobre cómo su modelo de negocio afecta la sostenibilidad y cómo factores externos, como el cambio climático y los derechos humanos, influyen en sus actividades. Esta normativa incluye la divulgación de emisiones indirectas en su cadena de valor, conocidas como Scope 3, difíciles de medir y controlar.
En este contexto, Hiili, una empresa cuyo nombre significa "carbón" en finlandés, está desarrollando una tecnología innovadora para cuantificar con precisión el consumo energético generado por la actividad digital de las empresas. Esta tecnología se basa en técnicas de medidas de Internet y en el desarrollo de modelos de Machine Learning, permitiendo estimar de manera precisa el consumo energético digital. Actualmente, Hiili tiene un producto operativo para la publicidad digital y un prototipo para medir el consumo energético de soluciones de IA, como los modelos de lenguaje Chat-GPT y Gemini.
Rubén Cuevas, cofundador de Hiili, destaca que su producto ofrece medidas directas del consumo energético, proporcionando las estimaciones más precisas sobre consumo energético y huella de carbono en este ámbito. La empresa no solo se enfoca en medir estas emisiones, sino también en ayudar a las entidades a tomar decisiones informadas para reducir su huella de carbono sin afectar sus indicadores clave de rendimiento (KPIs).
La colaboración entre Hiili y la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) ha sido crucial. La UC3M, investigando el consumo de energía digital desde 2017, ha sido un socio fundamental para Hiili y su empresa anterior, Cavai. Steffen Svartberg, otro de los socios fundadores de Hiili, subraya que su objetivo es convertirse en una empresa líder en datos de emisiones.
Hiili busca medir la huella de carbono que genera la actividad digital de las empresas, con un énfasis especial en el consumo energético que esta actividad genera en terceros. Un ejemplo ilustrativo es una compañía de refrescos que, aunque consume energía directamente en sus plantas de producción, también genera un consumo energético indirecto a través de sus actividades de marketing digital. Rubén Cuevas explica que mientras la medición de emisiones directas ya es una práctica común en muchas empresas, la medición de emisiones indirectas es un reto tecnológico complejo que Hiili está abordando.
La tecnología de Hiili no se limita a la publicidad digital y la IA, sino que es escalable y adaptable a todos los servicios digitales, incluidos sitios web, aplicaciones y plataformas. Esto la convierte en una solución versátil para las empresas que buscan medir, monitorear y reducir el impacto ambiental de todas sus actividades digitales.
La UC3M participa en el capital social de esta spin-off, contribuyendo a su desarrollo empresarial. Esta participación, minoritaria y temporal, se enmarca en el reglamento de creación de empresas universitarias basadas en el conocimiento. Actualmente, hay un total de 11 spin-offs participadas por la UC3M, apoyadas por el programa de creación y participación en spin-offs, ubicado en el Centro de Innovación en Emprendimiento e Inteligencia Artificial (C3N-IA) del Parque Científico de la Universidad.
